Todos tenemos miedo al fracaso en algún momento. No es una sensación agradable, puede afectar nuestra vida y nuestro desarrollo. Sin embargo, es importante entender que el fracaso forma parte de la vida. Si aprendemos cómo superar nuestro miedo al fracaso, podemos descubrir que hay muchas oportunidades para el éxito.

Una cosa antes, le llamamos “miedo” aunque es más una ansiedad a lo desconocido. No es un miedo real en el cual podemos perder la vida, sino a una preocupación a lo que no sabemos qué va a pasar. De todas formas, seguiré llamándole “miedo al fracaso” porque genera más ansiedad y se comprende mejor.

Bien, y antes que nada, algunas cosas que debes comprender sobre el miedo al fracaso:

  1. a) El miedo involucra a nuestro cerebro en la conversación equivocada.
  2. b) La mitad de todos los adultos admiten (admitimos) que el miedo al fracaso es el mayor obstáculo para lograr o incluso revisar sus objetivos.
  3. c) Los neurocientíficos coinciden en que lo más concreto en su campo es el hecho de que el miedo al fracaso, literalmente, apaga la parte de nuestro cerebro responsable de la exploración, el descubrimiento y el crecimiento.

Aquí hay 7 formas poderosas en las que puedes replantear tu forma de pensar sobre el miedo fracaso…

1) Solo hay tres formas de fracasar.

Uno de los principales factores que contribuyen al miedo al fracaso es la creencia de que el fracaso es algo malo. Esto es una creencia errónea. La verdad es que solo hay tres formas de fracasar: Cuando renunciamos, cuando no mejoramos o cuando nunca lo intentamos.

2) El fracaso es un evento, no una persona.

Es importante entender que el fracaso no es algo que tenga que ver con nosotros como personas. El fracaso es un evento, no una persona. Si fallas en algo, no eres un fracasado. Eres una persona que ha tenido un fracaso. Nunca generalices en exceso que estas ocasiones únicas son indicativas de la huella de tu marca personal o son presagios de un futuro fracaso generalizado.

3) El fracaso no te sucede a ti, te sucede para ti.

Necesitas creer que cuando fallas, fue por una razón.

Es importante entender que el fracaso no es algo que te sucede, sino algo que sucede para ti. El fracaso te ofrece la oportunidad de aprender y crecer. Si aprovechas esta oportunidad, puedes convertir el fracaso en éxito, para que pudieras experimentar un sabor más dulce más adelante. O puede haber tenido que suceder para que pudieras aprender algo vital que te impulsará al éxito. Como tal, el fracaso es un retraso, no un desvío.

Dentro de este contexto, hay dos puntos, literalmente, para fallar: cada fallo es un punto temporal en el tiempo y cada fallo tiene un punto positivo más permanente.

4) No sufres cuando fallas, lo hace tu ego.

El miedo al fracaso es en realidad el miedo que siente tu ego. Tu ego no quiere fallar porque teme que esto te hará sentir mal. Pero el verdadero yo no sufre cuando fallas, simplemente aprende de la experiencia. Aunque, nuestro ego es solo una pequeña parte de nosotros, la parte más ruidosa, quejica y exigente que necesita ser derribada de todos modos.

A pesar de nuestros mejores esfuerzos para mantenerlo bajo control, nuestro ego exige ser alimentado. Aunque debes recordar todas las partes de nosotros que se nutren en eventos de fracaso.

Aísla tu ego de tu verdadero yo cuando sientas que has fallado. Haz que tu ego se siente en la mesa de los niños, donde pertenece, mientras que el resto del adulto que llevas dentro disfruta de una agradable “comida” de descubrimiento y crecimiento.

5) Tu miedo al fracaso no debería asustarte, está tratando de decirte que algo vale la pena.

Cuando sientes miedo al fracaso, estás en realidad tratando de decirte que hay algo valioso que merece la pena luchar. El miedo al fracaso es como una señal de que hay algo que vale la pena intentar.

No temerías fallar en algo intrascendente, ¿verdad?

6) El fracaso es una parte clave de tu cartera.

Si aprendes a aceptar el fracaso, podrás ver que hay una lección valiosa que puedes aprender de la experiencia.

La carrera ideal contiene una cartera de oportunidades laborales, incluidas las arriesgadas, llenas de aventura, experimentación y, sí, incluso el fracaso. El conjunto de estas experiencias se combina para formar una carrera con un alto potencial de crecimiento.

Lo mismo en la vida.

Y, esto es importante, no hay una persona verdaderamente exitosa que no tenga el fracaso como parte de su cartera de vida. Ahora bien, tampoco te estoy diciendo que vayas a fallar en cualquier camino que tomes. Solo estoy desafiando lo que es el fracaso con su miedo y todo.

7) Si tienes miedo, hazlo con miedo.

Cuando sientes miedo al fracaso, es importante recordar que tienes el poder de superarlo. Si tienes miedo, hazlo de todos modos. El fracaso es una parte natural de la vida y el miedo puede ser una fuerza motivadora.

En marketing decimos “hazlo aunque sea mal”. Si no se hace siempre nos preguntaremos “qué hubiera pasado si lo hubiera hecho”.

Durante mucho tiempo me sentí como un fracasado cuando tuve que cerrar mi empresa de turismo rural y ocio en la naturaleza, Aventerra. Sobre todo cuando las personas cerca de ti te machacan con que has fracasado. Hasta que me di cuenta que mantenerla funcionando 5 años en los años 90 del siglo pasado, no era para sentirme como un fracasado, sino para ser uno de los pioneros a nivel nacional de un turismo que empezaba a florecer. Por cierto, esta experiencia me sirvió para que Parque Reunidos me contratara para crear y desarrollar el departamento de educación del Parque Selwo Aventura. Hoy en día, cuando miro hacia atrás ya no me acuerdo de todo lo que perdí y los problemas que aun me quedan, sino que surge una sonrisa de todo lo que hice como para sentirme orgulloso de haber creado Aventerra, Parque Natural de Aventura.

 

Como puedes ver, hay muchas formas de superar el miedo al fracaso. El fracaso no debe ser algo que nos aterrorice, sino algo que nos motive a seguir adelante a tener éxito. Si aprendemos a aceptar el fracaso como una parte normal de la vida, podremos descubrir que hay muchas oportunidades para el éxito.

No temas al fracaso. Ten miedo de estar en el mismo lugar el año que viene que estás hoy.